La marca y el logotipo.

Alexandra Mantelato Neiva

4/17/2021

La creación de algo comienza muy lentamente.
La idea surge y la dejas de lado porque piensas que no es gran cosa o que te estás volviendo loco y tal vez sería demasiado atrevido intentar crear algo.
Un pensamiento aquí, otro allá y cuando menos lo esperas todo resurge y se hace imposible no prestar atención a la voz interior que te recuerda cada día que debes actuar.
Tampoco se trata de crear algo sólo para uno mismo, como una mera satisfacción para el ego, sino de tocar de alguna manera la mente y el corazón de las personas.
No sólo quería crear una marca, sino algo que también vinculara “De Mala Na Mão” a mi nombre “Alexandra Mantelato Neiva”.
Una noche no pude dormir, y entonces con la punta del dedo comencé a escribir en el aire hasta quedarme dormido. Cuando desperté tuve la idea de un dibujo que estaba mejorando.
Ese mismo día, después del almuerzo, fui a tomar un poco de sol y entonces aparecieron los colores. El amarillo dorado del sol y su brillo plateado me hicieron levantarme, coger bolígrafo, papel y empezar a garabatear.
Las dos letras “M” del logo fueron realizadas directamente en oro.
La plata se convirtió en una “A” en el interior de la “M” más grande, formando también una “N”.
¡Listo! El logo de De Mala na Mão también identificaba mi nombre.
La idea pasó al diseñador y después de innumerables detalles y cambios, llegamos al resultado final que fue debidamente registrado en el INPI.
¡Muy atrevido!